De cara a las
elecciones provinciales del próximo 31 de agosto, una serie de encuestas
comenzaron a delinear el panorama político en Corrientes, marcando tendencias
que reflejan un creciente deseo de cambio en el electorado. Un informe
elaborado por el consultor en opinión pública Benjamín Gebhard, con una muestra
de 800 casos presenciales y un margen de error del 3,5%, reveló que casi el 70%
de los votantes desea un cambio total de gobierno, y un 21% prefiere una
renovación parcial.
Pese a este clima
de recambio, Gebhard destacó que las imágenes de gestión del gobernador Gustavo
Valdés y del intendente capitalino Eduardo Tassano continúan siendo positivas.
Sin embargo, el intento del mandatario provincial de posicionar a su hermano,
Juan Pablo Valdés, como sucesor, encuentra resistencias: un 60% de los
consultados expresó su rechazo a esta propuesta.
En el análisis por
espacios, Vamos Corrientes mantiene un piso del 30%, aunque enfrenta una fuerte
competencia. La Libertad Avanza, el espacio referenciado con el presidente
Javier Milei, aparece con el 32% y una gran cercanía del electorado, con un 52%
de afinidad, de los cuales casi el 30% se define como “muy cercano”. Lisandro
Almirón, identificado como uno de los principales nombres del sector, lidera
las preferencias dentro de este grupo.
Por el lado del
peronismo, el PJ conserva un 23,5% de cercanía con el electorado. Martín
“Tincho” Ascúa, actual intendente de Paso de los Libres, es el candidato con
mayor proyección y sin competencia interna significativa, según Gebhard.
Una segunda
encuesta, difundida por el propio justicialismo y elaborada por Ágora
Consultores, refuerza la percepción de cambio: un 58% de los votantes manifestó
su deseo de un nuevo liderazgo provincial. En este sondeo, Ascúa lidera las
preferencias con un 22%, seguido muy de cerca por Juan Pablo Valdés, con un
21%, mientras que otras figuras como el exgobernador Ricardo Colombi (ECO) y
Lisandro Almirón (LLA) aparecen más rezagados.
La campaña aún no
ha definido a todos sus protagonistas, pero las encuestas marcan un escenario
abierto, con fuerte polarización entre el oficialismo y las fuerzas opositoras
que buscan capitalizar el deseo de renovación que empieza a instalarse con fuerza
entre los correntinos.